En nuestro país, enfrentamos un desafío de salud pública que resuena en cada rincón de nuestra vibrante República: el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). Este artículo es un viaje a través de la prevención, el tratamiento y la desmitificación de creencias erróneas sobre el VIH, con el fin de forjar un camino hacia un futuro más saludable y consciente para todas y todos los dominicanos.
Prevención: el primer paso hacia la salud
La prevención es la melodía principal en la lucha contra el VIH. En nuestra isla, la educación sexual y la concienciación sobre el VIH deben ser tan fundamentales como el agua que rodea nuestras costas. La utilización consistente y correcta de preservativos durante las relaciones sexuales, la reducción del número de parejas sexuales, y el acceso a pruebas regulares de detección del VIH, son las piedras angulares de una sólida estrategia de prevención. Asimismo, programas de intercambio de agujas y la promoción del tratamiento como prevención (TasP) para personas con VIH, ayudan a reducir la transmisión del virus.
Tratamiento: la esperanza en la ciencia
El tratamiento del VIH ha avanzado significativamente desde los primeros días de la epidemia. Hoy, las personas con VIH en la República Dominicana tienen acceso a la terapia antirretroviral (TAR), un tratamiento que, aunque no cura el VIH, controla el virus y permite a las personas vivir vidas largas y saludables. La adherencia al tratamiento es crucial; es la clave para mantener la carga viral indetectable y prevenir la transmisión del virus a otros. El camino hacia el tratamiento efectivo está pavimentado con el apoyo de los sistemas de salud, las ONG y las comunidades.
Mitos comunes: desentrañando verdades
A pesar de los avances en el tratamiento y la prevención, los mitos y estigmas sobre el VIH persisten, oscureciendo el sol de la verdad con las nubes de la desinformación. Uno de los mitos más comunes es que el VIH es una sentencia de muerte, una creencia desmentida por las numerosas vidas prosperando gracias a la TAR. Otro mito es que el VIH solo afecta a ciertos grupos de personas; en realidad, el VIH no discrimina y puede afectar a cualquiera, independientemente de su edad, sexo, orientación sexual o estatus socioeconómico.
Es vital contrarrestar estos mitos con información precisa y accesible, promoviendo una cultura de empatía y apoyo en lugar de miedo y exclusión. La educación es nuestra mejor defensa, iluminando las sombras de la ignorancia con la luz del conocimiento.
Hacia un futuro sin VIH
La lucha contra el VIH en la República Dominicana es un baile entre la prevención, el tratamiento y la educación. Como sociedad, debemos liderar con el corazón, abrazando a aquellos afectados por el VIH con compasión y apoyo. La inversión en la salud pública, la investigación y las políticas inclusivas serán cruciales para avanzar hacia un futuro donde el VIH sea una sombra del pasado.
En la música de nuestra lucha contra el VIH, cada dominicano tiene una parte que tocar. Con cada paso hacia la prevención, cada nota de apoyo al tratamiento y cada acorde de verdad contra los mitos, nos acercamos a una melodía de esperanza, salud y unidad. Juntos, podemos crear una sinfonía de resiliencia que resuene en toda la República Dominicana, una melodía que cante de un futuro libre de VIH.
Por María Isabel Terán de Bonetti, Presidenta de Grupo Terán
