En junio pasado, el Comité Ejecutivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) concluyó su reunión número 172 en Washington, Estados Unidos. El Director de la OPS, doctor Jarbas Barbosa, afirmó que “debemos aprovechar la oportunidad de acelerar las acciones para recuperar los logros perdidos en salud pública y aumentar la resiliencia de nuestros sistemas de salud".
Si bien el Comité Ejecutivo resaltó los avances positivos en la cobertura de la vacunación contra la COVID-19, el doctor Barbosa instó a los gobiernos a centrarse en la identificación de las desigualdades existentes en materia de vacunas y a elaborar estrategias para garantizar una cobertura del 95% en todas las vacunas esenciales, así como a prepararse para la introducción de nuevas vacunas.
La reunión de la OPS también abordó la importancia de reforzar la capacidad de los países para mejorar el acceso a los medicamentos, las pruebas diagnósticas y otras tecnologías sanitarias, así como la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de los problemas de salud mental y otras enfermedades no transmisibles, que fueron áreas muy afectadas por la pandemia de COVID-19.
En cuanto a los avances de la región hacia la eliminación de enfermedades transmisibles (como la malaria, el VIH, la tuberculosis y el tracoma, entre otras) el Director de la OPS destacó la Iniciativa para la eliminación de enfermedades de la OPS como "motor de sistemas de salud pública más integrados, eficaces, eficientes y equitativos" que pueden alcanzar esa meta.
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Mejorar la salud en la región de América Latina y el Caribe es un objetivo complejo y multifacético que requiere la colaboración de gobiernos, organizaciones internacionales, profesionales de la salud y la sociedad en general.
A continuación, te presento doce acciones clave que podrían contribuir a mejorar la salud pública en esta región:
- Acceso universal a la atención médica: Garantizar que todas las personas, independientemente de su situación económica o ubicación geográfica, tengan acceso a servicios de atención médica de calidad.
- Promover la prevención: Fomentar programas de prevención y educación en salud para abordar enfermedades crónicas, enfermedades transmisibles y factores de riesgo, como el tabaquismo, la obesidad y el sedentarismo.
- Invertir en infraestructuras de salud: Mejorar y ampliar la infraestructura de atención médica, incluyendo hospitales, centros de salud y unidades de atención primaria, para brindar servicios más efectivos y cercanos a la población.
- Fortalecer la atención primaria de salud: Priorizar la atención primaria como la base del sistema de salud pública, enfocándose en la prevención, el diagnóstico temprano y el tratamiento de enfermedades comunes.
- Acceso a medicamentos esenciales: Garantizar el acceso a medicamentos esenciales y asequibles para todas las personas, reduciendo las barreras económicas y promoviendo la producción local de medicamentos.
- Promover estilos de vida saludables: Implementar campañas de concientización sobre una alimentación equilibrada, actividad física regular y hábitos saludables, para reducir la incidencia de enfermedades crónicas como la diabetes y enfermedades cardiovasculares.
- Salud mental: Priorizar la atención y promoción de la salud mental, reduciendo el estigma asociado y garantizando el acceso a servicios de salud mental de calidad.
- Vacunación: Fortalecer los programas de vacunación para proteger a la población contra enfermedades prevenibles y epidemias, como la influenza y otras infecciones virales.
- Salud materna e infantil: Implementar estrategias para reducir la mortalidad materna e infantil, mejorando el acceso a atención prenatal, atención obstétrica y cuidados pediátricos.
- Investigación e innovación en salud: Fomentar la investigación médica y la innovación tecnológica en el ámbito de la salud para abordar los desafíos específicos de la región.
- Gestión de emergencias y desastres: Fortalecer la capacidad de respuesta ante emergencias y desastres naturales, asegurando una coordinación efectiva entre los diferentes actores y sistemas de salud.
- Colaboración regional e internacional: Promover la colaboración entre los países de la región y con organismos internacionales para abordar desafíos de salud comunes, compartir mejores prácticas y recursos.
Estas acciones, si se implementan de manera integral y sostenible, podrían contribuir significativamente a mejorar la salud pública en América Latina y el Caribe. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada país y comunidad puede enfrentar desafíos específicos, por lo que las estrategias deben adaptarse a las necesidades y contextos locales.
